En esta obra se pretende hacer luz sobre los conocimientos vinculados con la scopometría aclarando conceptos propios de una de las técnicas de análisis y comparación desarrolladas en nuestro país y que por lo raro y complicado de su denominación es para la mayoría de las personas una disciplina casi desconocida e indescifrable.
Como todos sabemos la criminalística se nutre del conocimiento de varias ciencias, artes y técnicas, tomando de ellas elementos aplicables a la investigación criminal. Dentro del campo científico es básicamente el producto de tres ciencias naturales, la Química, la Biología y la Física, aplicando permanentemente en forma alternada o conjunta procedimientos identificativos y comparativos propios de las nombradas sobre las evidencias producto de un delito.
A modo de ejemplo y como lo detalla el criminalista mejicano Juventino Montiel Sosa (1), los diversos tipos de peritajes criminalísticos utilizan:
De la Biología: la Antropología Forense, la Medicina Legal, la Citología, la Hematología Forense, la Histología, la genética, etcétera.
De la Química: todas las ramas de Química analítica, Bioquímica, Química Orgánica e Inorgánica, Microquímica, etcétera.
De la Física: casi todas sus ramas, por ejemplo de la óptica utiliza la espectroscopia, la fotografía y la microscopia; por otra parte se utiliza la mecánica, la electricidad, los rayos X, la luz ultravioleta, la luz infrarroja, el análisis de activación de neutrones, la espectrofotometría de absorción atómica, el uso de otros instrumentos forenses de laboratorio, etcétera.
Ahora bien, los peritajes relativos al campo de la Biología y Medicina Legal tienen y tuvieron históricamente un encuadre bien definido, siendo su principal punto de estudio los cadáveres y los restos humanos.
También pasa y pasó lo mismo con los peritajes relativos al campo de la Química Legal, que se emplean para identificar sustancias, con la particularidad de ser en general destructivos o de transformación del objeto de análisis.
En cambio los peritajes relativos al campo de la Física en los inicios de la criminalística no tenían un carácter tan definido y era difícil encuadrar en un solo concepto su denominación, debido a la diversidad de su campo de análisis. Es así, que nacen los peritajes “Scopométricos”, que no son ni más
ni menos que los estudios físicos de las cosas en general o bien de las evidencias físicas en general, basados en técnicas de medición y comparación, metodologías que no alteran la materia o el objeto de
peritación.
El peritaje scopométrico sobre las evidencias físicas de un delito es una realización científica, técnica y muchas veces de recursos artísticos que permite determinar en forma categórica autenticidad, falsedad u origen de cosas en general, objetos de arte, documentos, grafismos, productos comerciales, etcétera.
Se aplican con una verdadera metodología de análisis propia, que fue creada y desarrollada en nuestro país y que posee leyes bien definidas que ayudan a la interpretación de los resultados de las comparaciones.
El basamento científico de los peritajes scopométricos es muy antiguo y nace como consecuencia del desarrollo de la ciencia criminalística en todo el mundo, tiene como sustento los conocimientos de la física, la óptica microscópica, la planimetría, la fotografía y el dibujo, aplicadas no sólo a los peritajes sobre manuscritos y documentos en general, sino a todos los peritajes sobre identificación de todo tipo de objetos aplicando métodos no destructivos, estos procedimientos son los se detallan en el desarrollo de este libro.
Básicamente sus métodos consisten en una observación minuciosa y meticulosa de los elementos sometidos a examen, realizando mediciones precisas para luego compararlos con ejemplares originales o auténticos aplicando una técnica desarrollada sobre la base de los métodos tradicionales de investigación, como lo son la inducción y la deducción, la aplicación de análisis extrínsecos (generales) e intrínsecos (particulares) sucesivos y comparativos. Además se aplican conocimientos de lógica investigativa para resolver problemas periciales, con el complemento de ejecución de experiencias y la correspondiente demostración ilustrativa, condición fundamental de sus conclusiones.
En esta obra se desarrollan los principios en que se basa la disciplina scopométrica, sus leyes y métodos. La mayoría de los estudios scopométricos son peritajes documentológicos aunque los mismos
comprenden también un rubro denominado “varios” pudiéndose consultar un listado resumido de los mismos en el desarrollo del capítulo I.
En el desarrollo de la obra se pone énfasis en enunciar los parámetros más importantes a tener en cuenta para cada estudio, especialmente en lo referente a la cantidad y calidad que deben reunir los elementos de cotejo con el objetivo de que aquellos lectores que no son profesionales en la materia, pero deban solicitar peritajes scopométricos, tengan una idea acabada de las necesidades mínimas que se requieren para poder efectuar un estudio de este tipo en forma completa y eficiente.
Para los peritos y expertos vinculados con estos análisis, sean Licenciados en Criminalística, Calígrafos Públicos Nacionales, Peritos en Documentología, Documentologos, etcétera, la obra seguramente resultará de interés ya que viene a llenar un vacío existente en estas disciplinas que resultan ser una variante metodológica a otros sistemas o técnicas.
Se reúnen trabajos de investigación pericial publicados en notas de revistas y textos de variada naturaleza y procedencia que a veces resultan difíciles de conseguir por tener ediciones limitadas, ser muy antiguos o de origen extranjero, además incluye material inédito resultado de investigaciones propias del autor que no se hallaban publicadas hasta la fecha.
Cabe hacer mención finalmente que se pretende también con el presente trabajo terminar con una antigua controversia surgida entre los expertos vinculados a la identificación de la escritura manuscrita en nuestro país.
La referencia esta dirigida a los Calígrafos Públicos Nacionales, Peritos en Documentología y Licenciados en Criminalística, quienes durante años han discutido sobre la idoneidad de sus métodos o la capacidad y alcance de la scopometría en estos menesteres.
El autor debe aclarar a esta altura de los acontecimientos que siendo poseedor de los Títulos Universitarios mencionados y un estudioso de la historia de la identificación humana, no existen diferencias sustanciales en los métodos de estudio que justifiquen mantener las viejas discusiones, ya
que tanto la técnica caligráfica tradicional o la aplicación del sistema scopométrico para la identificación de manuscritos o firmas tienen la misma base científica, cuyo origen se basa en las leyes de la escritura que son universalmente aceptadas. Solamente hay diferencias en cuestiones formales, en cuanto al modo de estructurar el informe escrito final, lo cual no invalida ni coloca a alguno de los dos métodos por encima o por debajo del otro, pudiéndose arribar a las mismas conclusiones por caminos
diferentes, es más actualmente existe la carrera universitaria de Calígrafo Público Nacional que tiene como base de su plan de estudio documentológico al sistema scopométrico.